El Hostal Doña Juana de Ágreda comenzó ayer la XVIII edición de las Jornadas del Bacalao. En esta ocasión el personaje ilustre será el cocinero Pablo Molina. El evento gastronómico se desarrollará todos los fines de semana hasta el domingo 4 de abril y se espera que participen cerca de 800 personas.
“Las jornadas son hoy un referente turístico de primera magnitud. A Ágreda le supone estar presente en el sector del turismo. Esta actividad lleva ya casi 20 años esforzándose para que la hostelería esté en el lugar que le corresponde. También sirven para publicitar Ágreda y lograr el acercamiento con otros pueblos”, señaló Luis Miguel Modrego Lacal, gerente del Hostal Doña Juana organizador de esta cita gastronómica.
La elección del bacalao para las jornadas no fue casual. “Todo empezó por la inquietud gastronómica de Ágreda”, matizó Modrego. En un primer momento se barajaron otros productos como el cordero, pero la estrecha relación del bacalao con Ágreda gracias a la bacaladera de la localidad fue lo que llevó a que se eligiera finalmente como el producto estrella.
Además, muchos agredeños ya tenían la costumbre de utilizar este producto, lo que facilitaba aún más su uso en las jornadas del Hostal Doña Juana.
“El menú es recopilatorio. Una de las señas de identidad de las jornadas es que siempre se intenta innovar, crear platos nuevos, pero siempre dentro de unos cánones de gastronomía tradicional. Esto se debe a que nuestros clientes tiene ya un espectro de sabores definido”, subrayó Luis Miguel Modrego.
Un estrella Michelín
Pablo Molina ya trabajó en los restaurantes Calima, en Marbella y Las Rejas, de Pedroñeras, ambos con una estrella Michelín, además de otros restaurantes punteros. Nació en Gójar, provincia de Granada, y cursó sus estudios en la Escuela Superior de Hostelería de Granada. El menú de las Jornadas del Bacalao se puede degustar por 45 euros. Algunos de los platos reunidos son crema de ajoarriero con lengua de ternera guisada y caviar; pimiento del piquillo relleno de cremosa brandada de bacalao y salsa de trufa; cogote de bacalao guisado con sus callos, guisantes, setas del Moncayo y menta, o mermelada de melón con crema helada de yogurt griego, entre otros.
Heraldo de Soria