La trufa de Soria eclosiona en la capital de España

El proyecto La tierra de la trufa se presentó ayer en el Mercado de San Miguel de Madrid despertando un notable interés entre medios de comunicación, personalidades invitadas y público en general que se dio cita para conocer esta iniciativa que quiere impulsar este preciado hongo como referente de un turismo cultural y gastronómico en las provincias de Soria y Guadalajara.

El popular Mercado de San Miguel, uno de los epicentros de la capital de España en materia de cultura gastronómica, acoge el lanzamiento de este proyecto, desarrollado por la Fundación Soriactiva de Caja Rural, ASOHTUR (Agrupación Soriana de Hostelería y Turismo), el Ayuntamiento de Abejar (Soria), la Asociación de Truficultores de Soria y la Asociación de Desarrollo Rural de Molina de Aragón-Alto Tajo (Guadalajara), que se extenderá durante los días 7 y 8 de octubre a través del desarrollo de diversos actos en donde la degustación de tapas elaboradas con trufa representa uno de los mayores atractivos.

Ocho establecimientos de restauración de Soria son los encargados de confeccionar las tapas de trufa que estarán a disposición del público a dos euros la unidad, un precio acomodado al valor de mercado de este exquisito manjar que alcanza en subastas los 1.000 euros el kilogramo.

Los establecimientos sorianos que han dado a saborear sus creaciones son: el Centro de Turismo Rural Los Villares, donde Pablo Cabezón y Lourdes Cascante han ideado Gelatina de colmenillas con cuajada de oveja trufada; el restaurante Virrey Palafóx, de El Burgo de Osma, con Enrollao de trufa y hongos con cobertura de mango, obra de César Martínez y Francisco Gregorio; Restaurante Fogón del Salvador, con Chupito de Otoño, de Montse Contreras; Restaurante Santo Domingo II, con ‘Tartaleta de bacalao y cardo rojo emulsionado en trufa con gelatina y su aceite, de Carlos Pesacador; Hostal Brasil, con Mejillón gratinado de trufa, de Tino Beato; Restaurante Chocolate a Tres, con Chupa-chup de trufilla de Soria, de Tomás Morchón; Hotel Alfonso VIII, con Buñuelo crujiente de ibérico de patata trufada, del equipo de cocina de Hotel Alfonso VIII, y Casino Restaurante con Relleno de calabacín perfumado de trufa, de Miguel Adámes.

Unido a la degustación de tapas, se han puesto a disposición del público marcapáginas con la receta de la tapa de cada uno de los ocho establecimientos.

Entre el programa de actos, a lo largo de la mañana del jueves tuvo lugar un encuentro entre truficultores de Soria y Guadalajara con cocineros y restauradores procedentes de diferentes provincias de España.